jueves, 31 de julio de 2014

La recuperación económica, la gran falacia del PP

raoyasustado
Rajoy, con la  única intención de perpetuarse en el cargo, tapa sus mentiras y contradicciones, con otras mentiras de mayor calado, que trata de vendernos como si fuese la panacea, cuando en realidad vamos camino de entrar en una espiral que nos conduce indefectiblemente  a  una ruina económica, que tardaremos décadas en superar. El PP ha conseguido en menos de tres años que nuestra país dependa exclusivamente de las "buenas intenciones" de los mercados, que alaban su labor a costa de tenernos totalmente dominados. Y no nos olvidemos de que la bajada de la prima de riesgo, ha servido única y exclusivamente para endeudarnos más, y depender aún más de los demás.
Los números cantan, y deberían de sonrojar a quienes afirman que estamos saliendo de la crisis, cuando lo que estamos consiguiendo es  estabilizar un grado de pobreza económica inimaginable hace muy pocos años. En el año 2011 nuestra deuda pública ascendía a 737.406 euros, lo que suponía un 70,50% de nuestro PIB, y significaba que cada español debía 15.942 euros. Y gracias a las políticas económicas del gobierno de Rajoy la deuda pública a finales del 2013  había ascendido a 960.666 euros, alcanzando un 93,90% del PIB, lo que situaba la deuda per cápita en 20.383 euros. Pero este proceso de endeudamiento sigue en aumento, y está a punto de alcanzar el 100% del PIB, lo que nos colocaría en situación de bancarrota, al deber más que lo que producimos.
Las "buenas noticias del gobierno" se fundamentan en que, con la bajada de la prima, ahora pagamos menos intereses, pero nadie nos ha explicado cómo se devolverá el aumento de la deuda que estamos contrayendo. De hecho una situación así se traduce en que  estamos secuestrados por los mercados, que pueden extorsionarnos cuando les plazca. Poco trabajo les costaría simular una nueva desconfianza hacia nuestro país, justificando así un aumento de la prima de riesgo y  la imposición de unos intereses inasumibles. Pero solo tensarán la cuerda si no nos portamos bien y desobedecemos sus órdenes, ya que por el momento somos un buen negocio para los especuladores, y  para  muchos años.
Si analizamos el Fondo de Reserva creado por la Seguridad Social para mantener las  pensiones del futuro, constatamos que cuando a finales de 2011 llegó al gobierno Mariano Rajoy, se había alcanzado la cifra máxima desde su creación con 66.815 millones de euros ahorrados. Y en menos de dos años  nuestros actuales gobernantes han sacado de la hucha más de 19.000 millones de euros, lo que supone más de un 25% del capital. Ello es consecuencia directa  del aumento del paro, la bajada del número de cotizantes a la Seguridad Social  y la precarización de los empleos, que hace que las aportaciones por cada trabajador hayan disminuido. Lo llamativo, y contradictorio, es que al mismo tiempo que el Gobierno afirma que la recuperación económica ha comenzado, se sigue metiendo mano en la caja común, y este mismo mes han dispuesto de otros 500 millones para pagar la paga extra del mes de julio. A este paso, en muy pocos años, el Fondo de Reserva se extinguirá y tendremos que seguir endeudados hasta límites inimaginables si queremos seguir pagando las pensiones.
En estos momentos hay más deuda, menos empleo, menos número de cotizantes, y más paro que en noviembre de 2011, cuando el PP ganó las elecciones por mayoría absoluta. Por lo que vender un fracaso como un triunfo resulta un insulto a la inteligencia de los ciudadanos. Y si añadimos los recortes en sanidad, enseñanza y bienestar social, debemos de pensar que Rajoy o es tonto, que lo  es, o es un hipócrita, que también lo es, cuando anuncia que todo va camino de solucionarse.
La situación es dramática y nos la venden como un logro positivo de este gobierno. Se puede mentir más, pero no mejor. Pero no es posible mantener por más tiempo un espejismo. La realidad es muy tozuda, y tarde o temprano, siempre sale a flote. ¿Hasta cuándo podemos soportar una situación así?. Los ciudadanos están siendo extremadamente prudentes, pero no es de descartar un conflicto social a corto plazo. Aunque también Podemos expulsarles con el uso de las urnas, el instrumento adecuado en un país que precisa recuperar cuanto antes la buena salud democrática, y acabar con la corrupción sistemática y con las mentiras.




martes, 29 de julio de 2014

el nuevo psoe


El “nuevo” PSOE, una incógnita con acento andaluz

pedro-sanchez-psoe-efe
Le deseo lo mejor al nuevo PSOE, porque la izquierda necesita reforzarse de verdad para llevar a cabo políticas acordes con su ideología,  conseguir una mayoría suficiente para gobernar este país, y recuperar todo el terreno perdido en los últimos años. Pero me temo que con frases grandielocuentes no se solucionan los problemas, y presiento que no se está llevando a cabo el cambio que les exiguen sus votantes. Su primer y grave error es creer que con rejuvenecer las fechas de nacimiento de sus dirigentes, ya se ha solucionado todo, y no es así.
En el Congreso celebrado el pasado fin de semana no hemos visto nada distinto que no se conociese de cónclaves anteriores. La única novedad es que ya se sabía con antelación el nombre y apellidos del nuevo Secretario General, pero en el resto, todo igual: peleas internas para acaparar cuotas de poder; marginación con los que no piensan igual que la nueva dirección, a pesar de las promesas de integración; navajazos puntuales incumpliendo los compromisos adquiridos con carácter previo; y hasta la creación inesperada de un nuevo puesto en la ejecutiva para encontrar sitio a un tal Javier Fernández, el único presidente autonómico elegido democráticamente que les queda en todo el país.
Está muy bien que prometan derogar la reforma laboral (¿también la suya aprobada en época de Zapatero?); que mantengan la promesa, incumplida por los propios socialistas reiteradas veces, de derogar el Concordato con la Santa Sede; y que incluso estén dispuestos, cómo no podía ser de otra manera,  a dejar sin efecto una hipotética modificaciòn de  la  la ley del aborto. Todo eso es positivo, pero no suficiente. Dado que Pedro Sánchez fue crítico con la modificación del art. 135 de la Constitución Española, con la que se priorizaba el pago de la deuda sobre la atención de las necesidades básicas de los españoles, a muchos nos gustaría saber si, de gobernar este país, estaría dispuesto el nuevo Secretario General a promover una nueva reforma del citado precepto,  dejándolo como estaba antes del vergonzoso pacto con el PP.  Nada ha dicho sobre este particular, y me temo que no entra en sus planes, por lo que seguiremos sometidos a los mercados y a las imposiciones de la troika. Es decir, más de lo mismo, pero con nuevas caras.
Javier Fernández, el presidente de la Comunidad Autónoma del Principado de Asturias, ha jugado un papel vergonzante y humillante. Se le había prometido la presidencia del Consejo de Política Federal, pero tal nombramiento recayó finalmente en Susana Díaz, que es quien ahora mueve de verdad los hilos del partido socialista. Para solucionarlo, sacaron de la chistera a última hora  un "Consejo de Transición Industrial y Energética", para buscarle un sillón en la nueva ejecutiva. Y aun así Javier Fernández se encuentra satisfecho y afirma que "el PSOE asturiano está mejor representado que nunca".  No obstante, nos tendría que explicar muy bien a los asturianos qué quería decir cuando afirmó que "ahora toca echar un cortina de amnesia inmediata"; ¿de qué tenemos que olvidarnos?. Porque eso de cerrar los ojos y abrirlos de nuevo para aparecer con un nuevo disfraz no deja de ser un fuego de artificio, de muy corta duración.
¿Y qué hay de sus planes de futuro  para acabar  con la corrupción?. ¿Tiene previst0 el nuevo PSOE impedir que en sus listas haya candidatos imputados, o expulsar de inmediato del partido a aquellos que lo estén en la actualidad?. Si es así Pedro Sánchez debería ser informado, si es que aún no se ha enterado, de que entre los que le aclamaban como Secretario General se encontraban dos alcaldes del partido, concretamente José María Fraile (regidor de Parla) y Juan José Dorta (alcalde de Icod, en Tenerife),  que ya han sido procesados por prevaricación y están pendientes de sentarse en el banquillo de los acusados.
Por cierto, el gran  error de Pedro Sánchez, que llevaba su discurso escrito, y por ello no es atribuible al nerviosismo del momento, fue equiparar la corrupción y la violencia de  género al independentismo. ¿Fue una ocurrencia suya, o se inspiró en alguno de sus asesores?; en todo caso es una manera de empezar rematadamente mal, y una demostración evidente de su mediocridad.
 Leire Pajín, que había dejado la política, vuelve a la escena política, y sin esperar a la cola entra directamente en el Comité Federal, junto con  Joaé Antonio Griñán, Elena Valenciano, Manuel Chaves, Trinidad Jiménez, Oscar López, Soraya Rodríguez, Joan Lerma, José Blanco, Gaspar Zarrias, y Marcelino Iglesias, por citar a los más conocidos; todo caras nuevas.  Eso sí que es renovarse, y a conciencia.
Ahora solo nos queda  esperar. Por el momento Podemos les ha tomado la delantera, y a pesar de criticar  a esta nueva formación por entender que su programa es pura utopía, ya les han copiado lo de publicar la contabilidad del partido en internet y la celebración de primarias abiertas. Aunque puede que esto último no vea la luz, no sea que se lleven una sorpresa inesperada, que trunque los planes de muchos. Tiempo al tiempo